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El conflicto armado colombiano en los últimos 30 años en Colombia ha generado más de 6 millones de víctimas. En el norte de Colombia, existe una subzona montañosa conocida como los Montes María, donde la violencia fue brutal; allí una gran masa campesina, agricultora y artesanal de personas civiles e inocentes fue torturada, asesinada o desplazada durante el conflicto armado colombiano.
En los Montes de María, durante el conflicto armado colombiano, hubo:
237 Masacres
Más de 10.000 Homicidios
Alrededor de 1000 secuestrados
Más de 200.000 Desplazados.
Cómo sucedió esto?
Hay 5 antecedentes de violencia que durante 5 siglos han determinado lo que sucedió en los últimos 30 años en los Montes de María:
Antecedente de violencia No.1. El genocidio de sus habitantes nativos por parte de los españoles en el siglo XVI y XVII.
A la llegada de los españoles en el siglo XVI, en los Montes de María, habitaban los indígenas zenúes, quienes eran laboriosos agricultores de yuca y maíz y tejedores de hamacas y tejidos de algodón. Una anécdota simpática cuenta que, cuando en 1509 sus caciques fueron informados por los españoles que ahora su territorio, por orden del Papa, pertenecía al Rey de España, estos respondieron “el papa debe estar borracho si da lo que no es suyo y el Rey debe estar loco pues pide lo que es de otros”. Respuesta Valiente que no los salvó del impacto de la colonización europea que arrasó violentamente con la mayor parte de su población en poco tiempo.
Antecedente de Violencia No. 2: La esclavitud africana en América y los cimarrones luchando por su libertad.
Los españoles trajeron también negros de Africa como esclavos para compensar la falta de mano de obra originada por el genocidio indígena. Uno de los principales puertos negreros se estableció en Cartagena de Indias a menos de 45millas al norte de los Montes de María. Algunos esclavos lucharon por su libertad y autonomía y huyeron continente adentro para establecer poblaciones de difícil acceso donde ser autónomos; a esos esclavos se les llamó cimarrones y a sus poblaciones palenques. En los siglos XVI y XVII, en los Montes de María estaban ubicados 12 de los 23 palenques que existían en lo que se conocía en ese entonces como la Provincia de Cartagena de Indias.
Antecedente de Violencia 3: Oleadas de colonizadores que se adjudicaron la tierra a la fuerza, concentrando la tierra en pocas manos.
En 1776, Antonio de la Torre y Miranda, en nombre de los españoles y buscando conectar a Cartagena con otras poblaciones en el sur, atraviesa los Montes de María, fundando pueblos donde encontraba poblaciones. Así fundó: Ovejas, Nuestra Señora del Carmen, San Jacinto, y San Juan Nepomuceno, entre otros. A partir de entonces, y hasta la actualidad, durante 240 años, oleadas de personas adineradas han llegado a los Montes de María, ocupando tierras ya sea comprándolas, o tomándolas a la fuerza, desplazando y violentando a los indígenas y negros o a sus descendientes mestizos, zambos y campesinos.
Los campesinos del siglo XX en Colombia (y en los Montes de María) son la descendencia de los indígenas americanos, esclavos africanos y europeos blancos, que, aunque en un principio fueron separados como si fueran castas, se mezclaron formando un campesinado pobre y explotado que han sido desplazados a áreas marginales y que deben trabajar la tierra que otros les han arrebatado. (Fals Borda, 1975)
Algunas cifras sobre la pobreza en los Montes de María:
Población estimada de los Montes de María: 596.914 habitantes.
El 69% de la tierra en los Montes de María está concentrada en pocas manos.
El 66% de la población de los Montes de María no tienen sus necesidades básicas satisfechas y el 33% está en condiciones de miseria.
Violencia 4: La guerra fría y la polarización del mundo entre USA y URSS.
A partir de la segunda guerra mundial, USA y URSS se enfrascaron en una disputa mundial por la imposición de su propia ideología política y económica. Latinoamérica, y especialmente Colombia, con el descontento de una gran masa de gente empobrecida y con un altísimo índice de concentración de la tierra, fue caldo de cultivo para el surgimiento de varias guerrillas que intentaban, por las armas, seguir el ejemplo cubano.
Ese descontento también ocasionó que, durante el sXX, en los Montes de María surgieran algunas de las primeras ligas campesinas de Latinoamérica; estas eran asociaciones que de forma pacífica luchaban contra las injusticias que sufría la gran masa campesina sometida y maltratada por cuenta de las familias adineradas que concentraban la gran mayoría de la tierra y adoptaban sistemas de producción feudalistas e injustos.
En los años 90s, mientras campesinos luchaban pacíficamente en los Montes de María por mejorar sus condiciones económicas y laborales, los guerrilleros saboteaban, extorsionaban y secuestraban a ricos terratenientes y amenazaban y asesinaban a pobres campesinos sin distinción; buscando tomar el poder por las armas. Los ricos armaron sus propios escuadrones armados para defender sus intereses económicos y políticos (paramilitares) y los campesinos terminaron siendo las víctimas indefensas de un fuego cruzado entre guerrilleros y paramilitares.
Violencia 5: El narcotráfico y el paramilitarismo a fines del sXX en los Montes de María.
Colombia es mundialmente famoso por producir y exportar drogas y por las sangrientas consecuencias que esto ha generado en su historia. El narcotráfico y sus nuevas fortunas se extendieron por todo el territorio nacional; incluyendo los Montes de María, que se convirtió en un corredor natural para exportar droga por el Golfo de Morrosquillo.
Tanto narcotraficantes como terratenientes y dirigentes políticos decidieron crear escuadrones propios de hombres armados (paramilitares) para controlar militar, políticamente y económicamente la zona de los Montes de María. Estos escuadrones o células paramilitares tenían como función:
– Defender a sus jefes de saboteos, extorsiones y secuestros de la guerrilla,
– Custodiar los intereses comerciales y/o políticos de sus contratantes.
-Sembrar el terror entre las poblaciones de campesinos para que no lucharan por su derecho al trabajo digno y a la propiedad de la tierra.
– Escoltar y/o ejecutar actividades de tráfico de narcóticos.
Así, desde los 90s y durante la primera década de este siglo, la sistemática violación a los Derechos Humanos durante el conflicto armado colombiano en los Montes de María, a través de violaciones, masacres, secuestros, y asesinatos de parte de la guerrilla y de los paramilitares en complicidad con el propio Estado colombiano, terminó desolando los campos; miles de campesinos emigraron a las ciudades a ser más pobres de lo que ya eran en sus propias poblaciones.
Pero HOY ESTAN RETORNANDO!!!!!
Algunos han encontrado que las tierras de las que los desplazaron les han sido robadas, otros aún no vuelven por miedo.
Y, aunque las condiciones de pobreza no han mejorado y la tierra sigue concentrada en pocas manos muchos otros han regresado y han encontrado la manera de reconstruir sus viviendas y volver a cultivar o a tejer a pesar de los traumas de guerra.
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Monica Marquez
Directora Fundación Latinlán
